Se truncó la racha del Leganés, candidato oficial al descenso, y el estado de ánimo del Mallorca cambió. Tres puntos balsámicos gracias al solitario gol de Dani Rodríguez
Por el contrario, la expectación del mercado de fichajes se cerró en falso con la incorporación de Chiquinho, un extremo caboverdiano que se nos presenta con unos registros que no invitan en demasía al entusiasmo.
Es el último ejemplar de un fútbol global de traspasos impersonales, surgidos de la industria manufacturera de futbolistas con sus representantes, que se ganan el futuro yendo de un lugar a otro. Toda la suerte al nuevo extremo. Cabe la remota posibilidad de que la ruleta del mercado nos haya traído un fenómeno.
De decepcionante balance se puede definir el cierre del mercado de fichajes
Si Valdano define un equipo de fútbol como un estado de ánimo, los tres puntos obtenidos en Butarque han renovado la atmósfera del equipo de Arrasate. Las caras serias de la rueda de prensa del pasado viernes – imposible para el oyente atento – han tornado satisfechas. El equipo se asienta. La victoria alegra, relaja y dulcifica el rostro y el corazón.
Con esta armonía nos vamos al parón liguero. La victoria de Leganés se alarga casi dos semanas. Son tres puntos largos. Ya nadie habla de puestos de descenso. Una maravilla.
Foto: LFP . Diario de Mallorca
