Se acerca la hora de la verdad con la disputa de la eliminatoria para el ascenso a Segunda División y percibo mucho rencor hacia Maheta Molango. Apenas sigo a unos pocos mallorquinistas a través de Twitter y leo las críticas contra el consejero delegado del RCD Mallorca al que siguen culpando en exclusiva del descenso al fútbol amateur. No creo que sea el momento de volver a encender fuegos o de desenterrar el hacha de guerra. Personalmente fuí de los más críticos no solamente con Molango sino con todos desde la propiedad, técnicos y futbolistas. Pero ahora ya no toca.
Los opositores a Molango tienen pánico de pensar que el suizo, en tan solo una temporada, pueda recuperar el crédito.
Oportunistas
Lo hicieron rematadamente mal, pero imposible. Se equivocaron en todos y cada una de las decisiones deportivas que se tomaron. Algo que denuncié y critiqué durante meses. Hoy ya no sirve de nada incitar a la masa social a volver a las barricadas y al linchamiento del staff, como llamaban algunos a los Molango, Recio, Pons y compañía. Hacerlo ahora es oportunismo malintencionado para tapar el haber cumplido el primer objetivo de la temporada con éxito. A los opositores a Molango les ha entrado el desasosiego y el pánico de pensar que el suizo, en tan solo una temporada, puede ser capaz de recuperar el crédito perdido y seguir mandando la institución rojilla.
Autoengaño
El consejero delegado tiene muy claro no solo lo él se la juega a nivel personal sino la propia institución centenaria. Es por ello que lleva trabajando en silencio, no por temor a ser criticado sino porque él es el primero que lleva como penitencia la Segunda B. Cada uno es muy libre de no perdonar la catástrofe del descenso. Querer ocultar el éxito deportivo de ser campeones y cumplir con la hoja de ruta es no querer ver la realidad. Tranquilos que cuando se logre el ascenso, Molango no será el protagonista. No pasará bajo la ducha del vestuario, tampoco se paseará por las calles de Palma en el bus descapotable ni se bañará en las Tortugas. Personalmente no voy a celebrar nada. Solo se habrá cumplido el objetivo si finalmente se asciende aunque entiendo a los que ya estáis ansiosos para que lleguen los fastos.
Portada: Molango con semblante serio en Son Malferit (Fútbol Balear).
