La televisión autonómica emitió esta semana un documental sobre la figura de Vicenç Grande abarcando la trayectoria del empresario y presidente del Mallorca de junio del 2005 a enero de 2009. Es una pieza muy recomendable para esas nuevas generaciones mallorquinistas alejadas de la reciente y convulsa historia del club. Fueron muchos los recuerdos que comencé a rememorar y analizar mientras veía las imágenes. Fue una época en la cual se vivía la actualidad del club con mucha ansiedad a nivel periodístico.
Es injusto que algunos se hayan marchado por su mala gestión económica pero sin una sola mancha en su comportamiento y valores.
Carismático
Grande, igual que Beltrán en su momento, acaparaba todos los focos. Es cierto que también podríamos sumar a este perfil de gobernar a Maheta Molango. Era un auténtico sin vivir informativamente hablando. Centrado en el empresario, propietario y presidente barralet, este consiguió, al igual que hoy ocurre con los actuales dueños, ser muy querido por la afición debido a su entusiasmo y aportación económica, además de sus grandes dotes como comunicador. Algo que ha quedado demostrando que no tienen, o no les interesa, a Sarver y sus socios.
Fe ciega
Al mallorquinismo auténtico le cuesta mucho dejar de creer en todos los que llegan con una buena puesta en escena y, por encima de todo, con dinero fresco sin ir más allá. Se han visto con buenos ojos las recalificaciones imposibles del Lluís Sitjar, la construcción de rascacielos, cambiar de orientación Son Moix y, en la actualidad, se creen a ciegas la difícil remodelación del estadio que venden los americanos. Aquello de que “de la ilusión también se vive”, es perfectamente aplicable a la gran masa social de la entidad. La cual, hasta que la situación es límite, prefiere apurar antes de pronunciarse contra quien ha ensalzado y protegido con sus silencios. Todo tiene un límite y, cuando la situación se convierte en insostenible, estalla la grada quien finalmente es quien dicta la sentencia social.
Intocable
Lo hemos visto con Serra Ferrer, Cerdà, Claassen y Grande. Quienes, durante mucho tiempo, parecían intocables bajo la protección de unas bases que aguantaban hasta que las crisis deportivas, económicas o sociales desataban pañoladas y hasta algún intento de asaltar el palco para expulsarles del club. Con ello quiero decir que. A pesar que Javier Tebas ha anunciado que LaLiga no tiene previsto mover ni un dedo en el caso Sarver según publica OKdiario, falta la sentencia de una grada la cual, si es declarado culpable de estos graves hecho, no se librará y el futuro de la entidad volverá a estar en el aire. Es injusto que algunos se hayan tenido que marchar por su mala gestión económica sin una sola mancha en sus comportamientos y valores humanos. Otros, con una brillante administración a nivel de club, están por encima del bien y el mal.
Tomeu aparte de tonto eres tonto. Te buscas constantemente problemas y ojalá te denuncien a ti y a tu perrito. Por cierto al menos ellos fueron carismáticos cosa que tú nunca lo has sido ni lo serás.
A qué se debe esta falta de respeto, Daniel? Yo sigo a Tomeu desde hace años y siempre me ha gustado conocer sus opiniones, aunque no siempre las comparta. No sé si tú eres muy carismático, pero me pregunro si desprecias tanto a los que hacen TT Deporte porqué lo lees? Visca el Mallorca!