No repitamos errores

Durante la semana se continuó calentando el ambiente con declaraciones de jugadores del equipo local y, sobre todo, con una desafortunadísima nota de prensa del equipo de Miranda prohibiendo a los aficionados mallorquinistas que acudieran al partido de vuelta lucir sus símbolos. Craso error. Este sobrecalentamiento artificial acabó por volverse en contra de los locales, que acusaron la presión mucho más que los pupilos de Vicente Moreno. Otro factor destacable fue el apoyo institucional a los futbolistas, cuerpo técnico y al consejero delegado Maheta Molango con la presencia del presidente Andy Köhlberg y del más mediático de los consejeros, Steve Nash. Ver a los jefes departiendo con naturalidad con todos -incluyendo aficionados- reflejaba una imagen de optimismo. Lo peculiar de esta propiedad hace que, lo que sería habitual en cualquier otro club, en este se convierta en noticia.

Entre otros detalles hay que destacar que no se llegó a llenar el estadio por el simple hecho de que el club burgalés no quiso vender más entradas a los aficionados mallorquinistas. También son dignas de meción las pegas y algún que otro mal modo hacia los enviados de los medios de comunicación isleños. Todo ello queda en puras anécdotas de este otro partido porque, finalmente, lo único realmente importante era que el  Mallorca acabase con su penitencia en Segunda B. Una vez en el fútbol profesional bastará con no repetir errores pasados y encarar con realismo esta nueva etapa. Casi nada…

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Portada: Steve Nash saludando a los aficionados en Anduva ataviado con una bandera mallorquinista (RCDM).