Mavi Garcia afronta su gran temporada. Aquella que está llamada a ser la de su plenitud. La mallorquina la afronta con una más que probada madurez deportiva. Algo que nos proyecta a soñar que puede alcanzar los mejores éxitos de su carrera profesional. Su último final de temporada fue brillante.
Ella misma lo comentó en la charla que mantuvo en El Rutómetro hace pocos meses y que pueden encontrar en este blog. La histórica escapada en el Mundial de Flandes y su victoria en San Luca de Bolonia, en el Giro dell´Emilia, coronaron un gran año. Pero, por encima de cualquier otra razón, terminaron de forjar la convicción de estar preparada para ir a por todas.
Ser la jefa de filas del UAE Emirates, debería significar el espaldarazo definitivo para salir a ganar sin complejos.
Superación
Unos dicen que llegó tarde a esto del ciclismo. Ella dice que lo hizo cuando le tocaba. Sabia actitud y respuesta. De nada sirve lamentarse con posibles que no fueron ni serán. Hoy y ahora, esto es lo que importa. Sus primeros compases en la competición fueron duros. Caídas, llegar a hacerse un hueco y un nombre en un pelotón muy anárquico. Conocerse y reconocerse en un oficio que va mucho más allá de dar pedales, no fue tarea fácil ni estuvo exenta de momentos de crisis.
Liberación
El cambio de Movistar por el Ale Ljubjana podría definirse como una liberación deportiva. Se quitó el corsé azulado y fue ella misma. Algunos pudieron pensar que perder el poderío de aquella estructura podría haberla abocado a la irrelevancia. Fue al contrario. Mavi García estudiaba rivales y las carreras en la tranquilidad de su hogar, con su pareja y entrenador, de forma sencilla pero certera y eficaz. Bien asesorada y con todas las ganas de comerse el mundo, empezó a correr feliz, sin resentimiento alguno, con recuperada alegría, y por consiguiente, con total seguridad en sus posibilidades. Los resultados empezaron a llegar.
Esperanzas
Mavi es hoy doble campeona de España en ruta y en contrarreloj. Su dominio a escala nacional es incuestionable, siendo muy respetada y vigilada en el pelotón internacional. Ser la jefa de filas en la nueva estructura femenina del UAE Emirates, debería significar el espaldarazo definitivo para salir a ganar sin complejos en la nueva temporada que ha comenzado a rodar.
Auge
Si antes afirmaba que Mavi García está ante su gran año, también se puede decir lo mismo de su modalidad. El ciclismo femenino ha dado pasos de gigante en muy poco tiempo. Cierto es que sigue quedando mucho camino por andar, pero es del género burdo no reconocer que ha habido importantes avances en los últimos años. Además de la incorporación de hasta doce escuadras UCI Women´s World Tour, el calendario contará con el regreso del Tour de Francia en su versión femenina.
Salto de calidad
Esta prueba está llamada a suponer un progreso histórico, representando un cambio definitivo para las mujeres ciclistas de hoy y del mañana. Su repercusión mediática mundial acercará a las Santesteban, Sara Martín, Sheyla Gutiérrez y a las sucesoras neerlandesas de Marianne Vos, como Van Vleuten, auténticas dominadoras del pelotón femenino, a terminar de consolidar la apuesta por la mujer profesional en el ciclismo.
Retos
Valencia ha dado la salida con las primeras carreras, banco de pruebas para el primer gran objetivo que se disputará en el siempre espectacular sterrato de la Strade Bianche. Allí seguro que veremos a Mavi luchar por la victoria. Le tiene muchas ganas a esta carrera que ha acariciado ganar en las dos últimas ediciones. Luego vendrán las clásicas de las Ardenas, la Itzulia, el Giro, el Tour y la cada vez más seguida Ceratizit Challenge by La Vuelta, entre muchas otras pruebas.
Les animo a ver alguna carrera de estas ciclistas. Seguro que les sorprende y divierte. Es un ciclismo más espontáneo, lo calificaría incluso de más irracional, en el sentido de que es menos medido o previsible que el de los hombres. Seguro que quedan atrapados y repiten. A las mujeres compitiendo, no hay quien les gane.