Alfonso Díaz atendió este lunes la entrevista del programa Fora de Joc de Canal 4 Televisió. El CEO de Operaciones Comerciales del RCD Mallorca celebró el buen arranque competitivo resaltando que “siempre es importante empezar bien porque la temporada es muy larga y pueden llegar rachas malas” agregando que en todas las áreas del club se “respira positivismo aunque debemos ser prudentes porque el optimismo desmesurado no nos lleva a ningún lado y hay que ir poco a poco”.
El CSD cree que todavía no debe entrar público porque tal vez consideran que el fútbol profesional tiene suficientes ingresos.
Sobre ruedas
“La propiedad está contenta con la marcha del equipo, entendiendo que la situación es complicada, además de sentirse esperanzada en que todo siga saliendo bien”, destacó Díaz. El antiguo director financiero de la entidad no escondió el “acierto desde el área deportiva es total con Luis García” de quien dijo que tiene un perfil “muy idóneo para la situación, respira optimismo y trabaja con un ímpetu envidiable”.
Heridas de la covid
También en la parcela deportiva, Díaz aseguró que la tesorería del club tiene un “pequeño remanente del presupuesto para afrontar algún fichaje” si se precisa en el mercado de invierno. En cuanto a las finanzas de la entidad, el CEO afirmó que la incidencia del coronavirus ya tuvo la pasada temporada “un impacto en pérdidas de dos millones de euros y este ejercicio será parecido a nivel de venta de entradas, abonos y que nuestros patrocinadores también lo están sufriendo”.
Reajustes
“Esperamos no tener que tomar la decisión de llevar a cabo una rebaja salarial si no hay más parones prolongados y puede volver el público a Son Moix”, explicó Díaz. El CEO no escondió que es el Consejo Superior de Deportes quien “cree que todavía no debe entrar público porque tal vez consideran que el fútbol profesional tiene suficientes ingresos y no dependemos tanto del taquillaje como sí los de Segunda B y categorías inferiores”.
Accionista
Sobre la salida de Steve Nash del consejo de administración, Díaz aseguró que su “puesto nuevo en la NBA como entrenador de los Nets le absorbe tiempo y dedicación” añadiendo que el canadiense “sigue siendo accionista y uno de los propietarios más importantes además de vivir los partidos y estar encima del equipo”.
