Los acontecimientos vividos en las últimas horas en la planta noble de Son Moix dejan muy claro el vacío de poder que existe en la institución mallorquinista. El fútbol profesional sigue sin dar crédito al episodio del anuncio de Vicente Moreno de abandonar el club la próxima temporada a pesar de tener contrato en vigor. Ojo, lo sorprendente es como trascendió y cuando. A falta de cuarenta y ocho horas de jugarse a noventa minutos el primer match ball por la permanencia en Primera División. Alguien, de manera interesada, movió hilos para abrir una crisis. La gran pregunta es por qué ahora.
Solamente cabe pensar en el caso de una filtración interesada por una cuenta pendiente de alguien contra el entrenador.
Filtración interesada
La lógica y el sentido común dicen que el club, si es verdad que lo supo el martes por la tarde, debería haberlo mantenido en secreto. La era Molango demostró ser una auténtica estructura hermética y muy seria en todas las cuestiones sensibles. Solamente cabe pensar en el caso de una filtración interesada a la prensa, en concreto a IB3 Televisió, por una venganza o cuenta pendiente de alguien de dentro contra el entrenador. Está claro que a esta persona el club y el equipo no le ocupa ni le preocupa. Su intención ha sido hacerle daño y desprestigiar al valenciano. Moreno reiteró en rueda de prensa que no ha hablado con nadie del club sobre este tema. Lo que no quiere decir que no lo haya hecho la empresa que le representa y en la que, por cierto, trabaja nuestro querido Alejando Campano además de algún otro conocido extrabajador del club que bien conoce como se mueve el entorno mediático de la isla.
Cabreo en Arizona
Con ello quiero decir que, por pura estrategia empresarial, decidieron filtrarlo después de comunicárselo al club para conseguir un efecto como el de dejar claro a alguien que quería una prueba pública de que Moreno no seguirá en el Mallorca. Con esa afirmación sus representantes pueden trabajar con libertad para vender y cerrar al técnico para otro club con los recortes de prensa donde queda claro que su representado no confirma que seguirá la próxima temporada. Me consta que al bueno del presidente este espectáculo penoso de guerra sucia le ha cabreado muchísimo. Me cuentan que lo mismo que tiene de afable, tampoco le tiembla la mano a la hora de tomar decisiones drásticasc omo sucedió con el cese de Molango que se resolvió en cinco minutos. En el club existe hoy un vacío de poder con un presidente desbordado por la situación. Ninguno de los actuales ejecutivos que el martes comparecerán en una rueda de prensa han podido manejar este final de liga tan difícil. Todo un fracaso de gestión.
Moreno ni es santo ni es inocente por mucho que le quieras dorar la píldora