Recientemente Toni Nadal recibió un merecido homenaje en Barcelona durante la celebración del trofeo Conde de Godó. Tuvo tiempo de atender a los medios de comunicación y salieron a relucir bastantes historias como ese espíritu luchador que tan bien supo transmitir a Rafa Nadal. Con él comenzó a trabajar con casi tres años. “La ilusión no me impide ver la realidad. A su vez, la realidad no me hace perder la ilusión”. Toni es profundo en sus planteamientos, pero huye de excesos retóricos. “No jugamos un juego de física cuántica o de la teoría de la relatividad. Nosotros jugamos tenis, algo más simple y sencillo”. Eso sí, el trabajo y el estar dispuesto a sacrificarse para llegar, es algo que ha sidos clave a lo largo de estos años.
Toni Nadal es profundo en sus planteamientos, pero huye de excesos retóricos.
Superación
Toni reconoce que los datos y los récords de Rafa hace que no exageremos cuando hablamos del mejor de la historia en tierra. Le gusta situar el tema en perspectiva histórica e incluso nos recordó al gran zurdo Rod Laver tal vez mejor incluso que Roger Federer o su propio sobrino. En todo caso la rivalidad entre el suizo y el mallorquín o con Djokovic forma ya parte de la historia de este deporte. Rafa tiene 16 Grand Slam, 4 Copa Davis, récord en títulos Masters 1000, y doble campeón olímpico. No caben los éxitos, pero no se conforma y esto sigue. Estuvo simpático al recordar como, cuando vió hace muchos años jugar a Novak Djokovic con Juan Mónaco en Wimbledon, le causó impresión el serbio. No es que Toni trabajase para la NASA. Pero ya fue a ver a Rafa y le dijo: “tenemos un problema serio, he visto a uno que juega muy bien”. Como es habitual tuvo buen ojo. Toni también recordó los años duros. No todo ha sido un camino de rosas para Rafa. Durante 2009 y 2012 sufrió lesiones que le impidieron tener continuidad en su juego. También tuvieron que prepararle un calzado especial en su día. Este mismo año 2018 Nadal se lesionó durante Australia y estuvo un tiempo sin compeir. Ha vuelto con ganas y triunfando por undécima vez en Montecarlo, Godó y hace unos días levantó su octavo título en el Foro Itálico.
De Roma a París
No se donde hubiera llegado Rafa Nadal sin ningún tipo de lesión. De lo que no cabe dudad es del gran trabajo de Rafa Maymó a lo largo de muchos años. Incluso, aunque Toni no lo dijese, su sobrino parece tener el don -cuando se lesiona- de dar paso a otros colegas de profesión como David Ferrer o Pablo Carreño, por ejemplo. Sí es cierto que la Copa Masters se podría haber jugado algún año en tierra batida. Pero en fin, paciencia. Toni cerró su charla y posterior coloquio recordando a las nuevas generaciones tenísticas. Ve mucho talento en Zverev, Shapovalov, Chung o Coric. A Kyrgios le ve enormes posiblidades, pero habría de centrarse algo más. No hubo secretos. Toni reconoció que vió claro que Nadal era un ambidestro importante. Escribía bien con la derecha pero tenía más fuerza en el brazo izquierdo. De nuevo tuvo buena intuición al apreciar el juego de su sobrino. La historia quiere más. Tras Roma nos vamos a Roland Garros, en Paris. ¡Eurosport, a tope!
