Lo que sucedió en Tenerife hace una semana me dejó una gran decepción. El empate no será malo si se sacan los seis puntos de Son Moix pero lo cierto es que es muy complicado ganar dos partidos seguidos en casa. Más todavía ante dos rivales incómodos como el Elche y el Oviedo con jugadores rápidos y con capacidad para hacerte daño.
El equipo estará más arriba en la tabla si da un plus lejos de casa.
Paso al frente
En mi época, cuando los rivales venían al Lluís Sitjar en Segunda, nos veíamos ganadores a priori. Ahora confío en la seguridad que tienen los futbolistas actuales en casa para ser solventes. Del mismo modo que estoy convencido de que salen al terreno de juego con los cinco sentidos en ganar también los partidos como visitante. Entiendo que al pensar que, dando un pequeño plus lejos de la isla, el equipo estaría mucho más arriba, pueda frustrar al mallorquinista.
Regreso
Lo que queremos todos es ver al Mallorca de nuevo en Primera que es donde se merece estar. Uno tiene sensaciones contradictorias porque hubiésemos firmado estar así a estas alturas pero también da rabia porque, tras tantos años de penurias, te ves muy cerca de poder volver a la élite. Si estamos en disposición de poder hablar de ello es porque se ha puesto orden en la parte institucional y se ha sabido elegir el proyecto con un entrenador y fichajes acertados.
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