El derbi no decepcionó a nadie y tuvo todos los ingredientes de un gran partido de fútbol. Con la mejor entrada de la temporada, las aficiones de RCD Mallorca y Atlético Baleares se encontraron en Son Moix con ganas de fútbol. En la grada, también se jugaba el derbi y quedó demostrado, una vez más, la tremenda superioridad de la masa social bermellona. La noticia positiva: no hubo incidentes entre las aficiones.
En el campo el RCD Mallorca fue mejor y en la grada se demostró una vez más la aplastante superioridad de la masa social bermellona.
Manzano, agasajado
Resulta paradojico. El entrenador que descendió al RCD Mallorca fue agasajado en la grada. Llegó junto a su equipo, el Guizhou Hengfeng Zhicheng de la Superliga china y se situó en el palco para ver un derbi que se recordará por la emoción. Junto a él, Nando Pons y Toni Servera y unos metros más arriba, Mario Suárez, con el que tuve la ocasión de comentar la gran superioridad mallorquinista en la grada.
El palco, lleno
El Atlético Baleares solo ganó el sorteo de campos porque el partido fue para el RCD Mallorca y eso lo vio toda la grada. Un derbi que nadie se quiso perder, que contó con una cantidad inédita de espectadores para tratarse de la Segunda División B. José Tirado, Vadillo, Miguel Bestard, representantes de las instituciones, el ex-alcalde de Palma, Joan Fageda, y otros muchos estuvieron en la grada junto a Maheta Molango.
Vicente Moreno, más metido que nunca
El entrenador del RCD Mallorca estuvo más metido que nunca. Vivió el partido intensamente y fue el jugador número 12. Estuvo poseído, nunca hasta la fecha y desde que entrena al RCD Mallorca, le habíamos visto así. Un derbi sin incidentes que no decepcionó a nadie.
Portada:Las aficiones del RCD Mallorca y Atlético Baleares. IB3TV.
