Las cuatro victorias consecutivas logradas por el Mallorca en Son Moix suponen doce puntos sobre doce. Son unos números espectaculares que provocan que los entrenadores rivales lleguen con el miedo metido en el cuerpo. Se vuelven locos con cambios de sistema y de futbolistas. El Lugo dejó a cuatro titulares en el banquillo como Malagón, Escriche -que lleva cuatro goles- además de Herrera -ocho- y Muñiz. El técnico de los gallegos fue sincero y reconoció en la sala de prensa que no le salió bien agitar tanto a su equipo. Vicente Moreno también hizo experimientos en Albacete y erró.
Las posibilidades de estar en PlayOff pasan por ganarlo todo en casa y sumar doce puntos lejos de Son Moix.
Enganchados
La goleada ante el Lugo permite seguir salvando pelotas de partido. El equipo vuelve a situarse muy cerca de la sexta plaza, a dos puntos del Oviedo. Con el rigor defensivo, el orden en el centro del campo y mucho peligro arriba se puede elaborar un cóctel letal para cualquier rival. Pero, como visitantes, nada de todo eso funciona como demuestran los apenas once puntos sumados lejos de la isla. Una pena porque, de mejorar esa faceta, el equipo estaría en PlayOff o incluso en ascenso directo, pero el casillero visitante penaliza el campañón del equipo.
Mirar hacia adelante
El ejemplo a seguir deben ser Osasuna, Málaga y Deportivo. La lectura positiva la encontramos en que, solo con tres victorias más, se sellará la permanencia y comenzará una nueva etapa para Moreno, Molango y Recio con la mirada puesta en la próxima temporada. Cuanto antes mejor, hay que trabajar para fichar y construir un súper equipo de Segunda para el próximo curso. Se puede tener ilusión para meterse sextos pero, con esta dinámica tan mala como visitantes, no será suficiente. Las posibilidades de estar en el cuadro de honor al final de la liga regular debe pasar obligatoriamente por seguir ganando en Son Moix. Quedan 21 puntos en juego sin olvidarse de los 24 que jugará como visitante. De ellos debería recolectar la mitad.
Perjudicados
Mientras dure esta situación hay que disfrutar del equipo en Son Moix. Ante los lucenses acudieron 7.433 fieles y siguen faltando los tres mil que prefieren quedarse en casa o por otras opciones de ocio. El club debería valorar con LaLiga los horarios que le colocan. Jugar en domingo al mediodía no ayuda por la franja de partidos de fútbol base y autonómico tan incñomodos para quienes viven lejos de Palma. Este horario medio fijado de matinales no está ayudando a que el capítulo de la asistencia mejore.
Portada: Celebración del primer tanto de Dani Rodríguez ante el Lugo (RCDM).