El RCD Mallorca publicó en sus medios oficiales una entrevista a Aleix Febas. El centrocampista está viviendo la recta final del confinamiento entrenando como sus compañeros en su domicilio a la espera de de reanudar los entrenamientos. El futbolista catalán reconoció sus ganas de volver “a la normalidad porque esto parece una pesadilla” aunque matizó que, aunque el cuerpo técnico les “mete caña” en el vestuario son un “grupo currante que echa de menos tocar ya el balón y estar día a día con los compañeros”.
El parón llegó en mal momento porque el equipo estaba con buena dinámica tras la primera victoria fuera de casa
Vuelta a la normalidad
Ante el inminente regreso a Son Bibiloni, Febas es optimista al asegurar que al grupo le “costará poco recuperar las sensaciones como equipo porque mantenemos el contacto por videollamada”. El jugador de 24 años recuerda que el vestuario está “concienciado con lo que viene porque el míster nos hace pensar en los partidos que vienen para tener ventaja y estar reforzados mentalmente”. El debutante como rojillo este curso no esconde que la parada por la cuarentena llegó “en mal momento porque el equipo estaba con buena dinámica tras la primera victoria fuera de casa en Eibar”.
Puerta cerrada
Febas no esconde que el hecho la liga se reanude a puerta cerrada supondrá un “golpe bajo porque la afición ha sido importante en la regularidad en Son Moix” añadiendo que todos se “juegan mucho” porque “seguir en Primera es muy importante”. El autor de dos tantos en la Copa del Rey ante el Zamora y el Zaragoza no descarta poder sacar algo positivo en el primer partido tras la reanudación a pesar de medirse al líder argumentando que “si ganamos al Madrid en casa, por qué no al Barça”. El jugador nacido en Lleida es consciente que el calendario “será muy apretado en dos meses como máximo toda la competición” y asegura que llega un “sprint final con habrá pocos descansos” incidiendo en que existe “una plantilla amplia”.