Enric quiere y puede más. Lo vimos en el Pico de Villuercas, en plena serranía extremeña de Guadalupe. Bien colocado y siempre entre los mejores, controlando la situación y el escenario, todo un indicativo que nos avisa que el ciclista mallorquín está en la mejor disposición para optar a lo máximo.
En apenas cinco días de carrera, el duelo de la Vuelta’24 ya está definido: Roglic vs Mas.
Al acabar la etapa, delante de los micrófonos, Enric Mas diagnosticó el rival a batir: Primoz Roglic. El esloveno persigue desde hace dos años su cuarta Vuelta. El objetivo del Tour no fue posible. Las caídas y un poderoso Pogacar le arrebataron un sueño que se va esfumando cada temporada que pasa. La cuarta ronda española, igualar a Roberto Heras, el ciclista con más triunfos en la historia de La Vuelta, es la empresa a conquistar.
Una cita con la historia del ciclismo mallorquín.
Pero regresemos a nuestro Enric. La exigencia que supone la consideración de ser el jefe de filas del Movistar, el principal equipo español en el pelotón internacional, obliga conseguir resultados. Ya se sabe aquello de que cargos son cargas.
Enric Mas ha asumido y digerido esta responsabilidad. No todos pudieron. La Vuelta le sienta bien. Es su carrera fetiche, conoce el territorio y sabe que el equipo se crece en las carreteras españolas. Una amalgama de buenas sensaciones que augura que, el sueño que hasta en tres ocasiones estuvo tan cerca, se puede lograr en esta edición.
El mallorquín ha digerido la presión extra que suponer ser el líder indiscutible del Movistar
La tercera semana siempre fue su fortaleza. Es un ciclista que, cuando casi todos comienzan su declive o apuran sus últimos resquicios de fuerza, se crece y da lo mejor que tiene. Lo sabe y cuenta con ello. La calculadora mental está coordinada con las piernas. No cabe mejor sensación. No es el momento de regalar esfuerzos baldíos. Es tiempo de gestionar e ir eliminando rivales sin perder la rueda de quien es su gran adversario.
En apenas cinco días de carrera ya sabemos cuál es el duelo de esta Vuelta: Roglic vs Mas. Apasionante e histórico para el ciclismo mallorquín.
