Toca dar explicaciones

El presidente del RCD Mallorca, Andy Köhlberg, ha decidido volver a su casa futbolística por navidad. Al menos para la previa de unas fechas muy señaladas en el calendario. Se le pudo ver en el Metropolitano transitando por los pasillos de los vestuarios, como siempre acompañados de su esposa. A los dos se les vio felices repartiendo abrazos y enhorabuenas a sus jugadores por el triunfo. Köhlberg aparece en periodos muy especiales de la ligas. Principalmente durante las épocas de fichajes o en fechas señaladas en el calendario del equipo, como en este caso la visita al vigente campeón.

El mallorquinismo agradecerá una explicación ante la crisis interna del club más profunda con esta propiedad.

Ley del silencio

Esta presencia en la isla del socio de Robert Sarver es la primera tras estallar el escándalo del máximo accionista del club en los Estados Unidos. Una investigación que tiene contra las cuerdas al propietario unos Phoenix Suns del que Köhlberg es vicepresidente de la franquicia. La pregunta que nos hacemos es si el presidente comparecerá en algún acto público como, por ejemplo, con el Ajuntament de Palma para firmar el acuerdo o solo para presentar de manera unilateral el proyecto del nuevo estadio de Son Moix, antes de enviarlo al área de urbanismo municipal.

Köhlberg, acompañado por su esposa, abraza a Kubo en el túnel de vestuarios (RCDM).

Imagen

Todo hace pensar que se trata de la segunda opción ya que el acuerdo, por una cuestión de plazos, es imposible que haya sido ya estudiado, debatido y aprobado por Cort tal y como han reiterado desde el consistorio del alcalde José Hila. Con la que le está cayendo a la propiedad americana, bajo investigación por presuntos actos de racismo y misoginia, ¿las autoridades se sentarán en la misma mesa y se fotografiarán juntos? Sin duda estamos ante un escenario políticamente muy delicado. Es cierto que la imagen y las formas de Köhlberg han sido impecables en todos los aspectos desde un trato exquisito con las instituciones e implicación con el club y su integración social en la isla.

Precaución

Pero todos estos factores no pueden hacer olvidar lo que está pasando en la NBA y que, de alguna manera, debe tener a todos en guardia. El futuro del club con esta propiedad, mientras Sarver forme parte del accionariado, es una incógnita. El Ajuntament, o cualquier otra institución local y autonómica que mantiene una relación económica con el club, no pueden dar un paso en falso si desde Son Moix quieren ejercer el control total sobre el estadio y sus terrenos. Por mucho que sea el Mallorca con sus catorce mil abonados y como referente de la sociedad balear.

Rendir cuentas

Veremos si hay foto con políticos, firma de acuerdos y, por encima de todo, cualquier acto propagandístico para desviar la atención. Tenemos pendiente una comparecencia con el presidente ante los medios de comunicación para que responda a todas las preguntas sobre el caso Sarver y hablar del futuro del club. El presidente tiene credibilidad suficiente y se ha ganado el cariño de un mallorquinismo que seguro le agradecerá una explicación y fortalecerá su figura ante la crisis interna del club más profunda desde la llegada de esta propiedad.

Sobre Tomeu Terrasa

Comunicador dedicado durante más de 30 años a la información deportiva. Ha narrado al RCD Mallorca en Primera y Europa además de acompañar a Moyà y Nadal alrededor del mundo desde 1997.

Deja una respuesta

*

Acepto la politica de privacidad *