Miquel Bestard, presidente de la Federació de Futbol de les Illes Balears, estuvo presente en la importante reunión del resto de territoriales de los deportes de las islas con Fina Santiago, consellera d’Afers Socials i Esports, para abordar la posibilidad de que el Govern apruebe la obligatoriedad de vacunación para que todos los federados puedan competir.
Tomeu Terrasa: ¿Han recibido ustedes alguna comunicación oficial sobre la aprobación de esta medida?
Miquel Bestard: Todavía no. Lo que se acordó en esa reunión, mientras no se apruebe en el BOIB su obligatoriedad, fue iniciar una campaña para motivar a la vacunación para no volver a tener una temporada con tantos contagios como la anterior.
¿No les parece que se hará obligatorio?
No lo puedo asegurar porque seguramente deberán revisarlo los expertos jurídicos. Estamos muy contentos de que la mayoría de clubes se han implicado para que la gente de nuestro fútbol se vacune a falta de un mes para empezar a competir.
¿Han percibido esta corriente de padres que se niegan a vacunar a sus hijos menores de 16 años?
La mayoría de clubes están vacunándose pero siempre habrá alguien que no estará de acuerdo.
Sería importante que antes de que la Conselleria tome una decisión puedan estar casi todos los futbolistas vacunados.
¿Qué consecuencias puede tener para los futbolistas y las familias que se nieguen?
Si se hace obligatorio lo estudiarán los servicios jurídicos. Nosotros siempre vamos de la mano de la Conselleria de Salut e intentamos hacer lo que se nos dice. Es lógico que, ante esta situación, tratemos de evitar tener que llegar a impedir que alguien se quede sin licencia y lleguemos al enfrentamiento pero hay gente muy cabezona.
¿Ya hay futbolistas menores de 16 vacunándose?
Los entrenadores les dicen que pueden irse a cualquier centro para hacerlo escogiendo también la vacuna. Se están dando muchas facilidades para ello y sería importante que antes de que la Conselleria tome una decisión puedan estar casi todos los jóvenes futbolistas vacunados.
