Vicente Moreno tiene razón al afirmar que el Mallorca necesita ahora mismo victorias. Esa debe ser la prioridad dentro del club a pesar de que se busque un recambio en el puesto de mando de la institución para liderar la gestión del día a día. Lo normal es que el descenso se decida en las últimas dos o tres jornadas. Hasta entonces hay que mantener la línea aunque se haya perdido ante un rival directo como el Espanyol. Ahora parece que la dinámica ha cambiado tras ganar al Alavés pero de nada sirve si no se puntúa ante los siguientes rivales como el Betis y el Getafe.
La prioridad debe ser seguir ganando partidos por más que se está buscando un recambio en el puesto de mando del club.
Sin obsesiones
Desde mi punto de vista ahora mismo no es prioritario estar demasiado pendiente ni obsesionarse con los resultados de los equipos que también pelean por el mismo objetivo. El Mallorca debe centrarse en su partido, ganar y luego pasar esa presión a los rivales que ya sabrán que has sumado tres puntos más. El Celta sacó un gran resultado en el Bernabéu, el Espanyol en Sevilla pero los rojillos deben mantener la línea de meter miedo a los equipos de abajo empujando hacia arriba.
Sin complejos
En cuanto a la circunstancia que al Mallorca le queda un calendario con más salidas que partidos en Son Moix, debo decir que no siento miedo. Siempre que el equipo ha jugado ante rivales superiores ha demostrado otro tipo de juego. Lo vimos ante el Real Madrid con una victoria totalmente inesperada. También en la goleada ante el Valencia o el Villarreal. Incluso en partidos donde el equipo no ha ganado, se hicieron buenos minutos ante la Real Sociedad, en Mestalla, ante el Athletic Club y en la segunda mitad frente al Atlético de Madrid y el Betis en casa.
