El empate en la Romareda (2-2) deja una extraña sensación en Zaragoza y Mallorca pero puede darse por bueno a tenor del descontrol que se produjo en la segunda parte a partir de la lesión y retirada de Salva Sevilla. El encuentro parecía controlado y sentenciado al descanso con el cero a dos. Este punto sirve a los de Vicente Moreno para seguir en la parte alta.
El empate en Zaragoza debe darse por bueno a tenor del descontrol tras la lesión de Salva Sevilla.
Parera salva puntos
El Zaragoza parecía asfixiado, bloqueado y sin soluciones pero recibió una bocanada de aire fresco porque los futbolistas rojillos recibieron un bofetón anímico con la preocupante lesión de su centrocampista. Al final ambos equipos tuvieron suficientes ocasiones para haberse llevado el encuentro fruto de las idas y venidas, pero les faltó acierto a Aridai y Álex López. Si estuvo entonado Miquel Parera salvando el punto que conservaba a duras penas su equipo. Ya podemos decir que el manacorí es de esos porteros que dan puntos a su equipo.
Relajación
Lago Junior, autor de los dos primeros tantos, reconoció que el equipo salió relajado tras el descanso. Ello puede explicar por qué los mallorquinistas no han sabido conservar una ventaja cómoda pero peligrosa debido a esta misma circunstancia. La lesión de Sevilla ha sacado al Mallorca del partido y los cambios de Lucas Alcaraz han sumado, como en el caso de Marc Gual, para llegar a equilibrar la balanza. Queda demostrado que el centrocampista andaluz es el faro guía de este equipo. Así lo dicen los números y también quedó plasmado sobre el césped con su ausencia.
Portada: El Mallorca no pudo pescar en río revuelto ante un Zaragoza necesitado (LaLiga).