La crisis de juego y resultados es evidente. El Mallorca maquilló, con un gol de Sastre en el último minuto, una de sus peores actuaciones de la temporada (1-1). Jugaban el líder y uno de los equipos que está en la zona de descenso con un Mallorca que está sufriendo tras un mes sin conocer la victorias y con los dos últimos empates con más pena que gloria.
Nadie hubiese podido decir que el Formentera no se merecía los tres puntos en su visita a Son Moix.
Ni con Lago
En la primera parte el Mallorca sacó toda su artillería sacando a Lago de inicio y el regreso de Álex López. Curiosamente, con toda la pólvora sobre el césped, las únicas ocasiones de gol fueron la del primer minuto con un centro lateral y otra en el último de la primera parte con una acción a balón parado. Vimos a los de Vicente Moreno inoperantes en ataque y erráticos en defensa en algunos momentos. Por su parte, el Formentera demostró que la mejor forma de defender el tanto logrado por Gabri era teniendo el balón.
Castigo excesivo
El Formentera fue creyendo en sus posibilidades a medida que avanzaba el encuentro y pudo haberle dado la puntilla al partido de haber resuelto sus oportunidades con dos goles anulados. Fue un castigo excesivo para los pitiusos por segundo partido consecutivo si recordamos su derrota en el Rico Pérez. Nadie hubiese podido decir que el Formentera no se merecía los tres puntos en su visita a Son Moix.
Los futbolistas del Mallorca se mostraban aturdidos e impotentes tras el encuentro. Foto: RCDM.